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LOS CHAKRAS DE LA TIERRA El Planeta que habitamos es como nosotros, un ser vivo que siente, envejece, enferma y muere. Nos acoge en su interior, es nuestro hogar, y por lo tanto deberíamos cuidarlo y respetarlo. Ya sabéis que los seres humanos tenemos distribuidos por nuestro cuerpo unos centros energéticos llamados Chakras, la tierra también los tiene. Estos se encuentran localizados en diferentes puntos del planeta. Su sentido es el mismo que en nuestro caso, mantener la energía, mantener la vida. Todas las manifestaciones de agresividad, intolerancia, negatividad, etc. son recogidas por los Chakras que actúan como si fueran extractores gigantescos a nivel sutil. La energía resultante de esta vibración es ingerida hacía el interior del planeta y sus efectos salen con el tiempo en forma de erupción volcánica, terremotos, maremotos, etc., todo esto es producido por dicha energía contenida en el núcleo terrestre, energía que tanto por dentro como por fuera es contaminante, pues la vibración que tiene es baja y densa. La Tierra está enfermando, mejor dicho lleva enferma mucho tiempo. Las personas que poblamos este Planeta en su mayoría ignoran el porqué de estas reacciones, de estos cambios climáticos tan bruscos, de estos desastres naturales. Seguramente la Ciencia no estará de acuerdo con esta teoría, pero si pensamos con mente abierta y algo lógica, está absolutamente claro que la Tierra se defiende, se queja del poco caso que la hacemos. ¿Qué podemos hacer? ¿Existen soluciones? - Pues claro, todo tiene solución. Solo hay que buscarla y luego pasar a la acción. Únicamente se necesita un pequeño esfuerzo por parte de todos. Por un lado, contribuyendo a que el aspecto físico de nuestro planeta no se deteriore más, procurando mantener limpios los lugares de los que disfrutamos, como son: los bosques, las montañas, los ríos, el mar..... Por otro, utilizar productos no tóxicos para el uso doméstico, ecológicos (de venta en supermercados). Y por último, intentando que nuestros pensamientos sean lo más positivos posibles; eso solo se consigue con el trabajo interior. Lo curioso de este trabajo es que, aunque cuesta, merece la pena, pues conlleva observarse uno mismo, escuchar los dictados internos, en definitiva ser tu propio maestro. El resultado de todo esto es la satisfacción de descubrir que poco a poco tú te vas conociendo. No nos engañemos, somos unos perfectos desconocidos de nosotros mismos. Creemos entender nuestros pensamientos y emociones, pero no es así, somos tan vulnerables... Os puedo asegurar por propia experiencia, que aunque sea muy lentamente, el esfuerzo por llegar a conocerse y rectificar los errores aprendiendo de ellos, así como el intento diario por ser mejor y más solidario, da sus frutos. Trabajando el pensamiento y la acción hacía lo positivo, irradiamos una vibración alta y sutil que se traduce en energía sin impurezas. Esta, además de beneficiarnos a nosotros y a nuestro entorno, beneficia al Planeta, pues es absorbida por sus chakras energezitándole. Nuestra Madre Tierra nos está mandando continuamente “S.O.S” para que la ayudemos. Seamos solidarios con ella que tanto nos regala y tratemos de echarla una mano, pues al mismo tiempo también estaremos echándosela a la humanidad. Construyamos una naturaleza entre todos igual o mejor que aquella que nosotros conocimos de niños, para que las futuras generaciones tengan el privilegio de disfrutarla. Gloria
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